La patria potestad se encuentra regulada en el Código Civil y puede definirse como un conjunto de derechos que la ley confiere a los padres sobre sus hijos no emancipados, así como sobre los bienes de estos. Pero, también, recoge los deberes que los progenitores deben cumplir en relación con su descendencia. Como abogados especialistas en divorcios queremos profundizar en el concepto de guardia y custodia, ya que a veces es fácil confundir ambos términos y difieren entre sí. En este último caso, hacemos referencia a la obligación de vivir, cuidar y asistir a los hijos, pero esta acción se puede atribuir a uno de los padres, ambos progenitores e, incluso, a una tercera persona.
Es evidente que la patria potestad debe ejercerse siempre en beneficio de los hijos. Entre los deberes fundamentales de los progenitores podemos destacar: cuidarlos, protegerlos, alimentarlos, educarlos, así como representarlos legalmente. Generalmente, la patria potestad se ejerce de forma conjunta por los dos progenitores. Indistintamente del sexo de estos o de si están casados o no. En algunas ocasiones esta responsabilidad recae sobre un único progenitor, aunque en estos casos deberá contar con el consentimiento de otro.
¿Se puede perder la patria potestad?
- Mediante sentencia judicial los progenitores pueden perder la patria potestad. El principal motivo para que se ponga en tela de juicio si una determinada persona se merece disfrutar de este conjunto de derechos, es precisamente el incumplimiento de sus deberes para con sus hijos.
- Otro motivo para retirar a los padres la patria potestad es que sean demasiado severos con su progenie o pongan en riesgo la formación de los menores. Aunque es cierto, que pueden recuperarla cuando puedan acreditar que las condiciones que les privaron de ella ya no tienen lugar.
Desde Divorcios Express queremos resaltar el hecho de que un progenitor que haya sido condenado por sentencia penal de un delito de violación, perderá automáticamente la patria potestad sobre el hijo resultante de esa acción. Del mismo modo que si la filiación se determina judicialmente en contra de la oposición de alguno de los progenitores.
Cuando una persona se enfrenta al riesgo de perder la patria potestad, es recomendable acudir a un abogado especializado para garantizar la defensa de los derechos en función de las particularidades de cada caso. Recibiendo así, el mejor asesoramiento legal para proceder de manera consecuente.