La guardia y custodia compartida es una fórmula a la que cada vez se acogen más parejas divorciadas con hijos en común, tal y como podemos comprobar cada día en nuestro despacho de abogados de divorcios en Madrid. Como ya te hemos contados en varias ocasiones que abordamos cuestiones relacionadas, este régimen de custodia constituye la mejor forma de que los dos progenitores participen en el desarrollo educativo, afectivo y personal de sus hijos.
Sin embargo, este tipo de custodias no siempre son concedidas por los jueces y se estima que en la actualidad, ente el 10% y el 15% de las solicitudes de guardia y custodia compartida son denegadas. ¿Quieres saber cuáles son los tres criterios que más peso tienen a la hora de atribuir este régimen de custodia? Es lo que vamos a contarte a continuación.
Buena relación entre los progenitores
Cuando los padres divorciados tienen una relación cordial y ambos reconocen que su ex pareja es un buen padre/madre, las posibilidades de que la custodia compartida sea concedida son mucho más altas. El hecho de que un progenitor tenga total confianza a la hora de dejar a los hijos menores con el otro y confíe en su capacidad para educarlos, son motivos más que suficientes para que la custodia pueda repartirse entre ambos. Si además los pequeños se sienten cómodos con la situación, entienden el reparto de convivencia y saben que los dos los quieren por igual, la situación es la más propicia para que este régimen del que hoy hablamos pueda llevarse a cabo.
Obviamente, cuando entre los progenitores no existe una buena relación y están en constante conflicto, los niños serán la moneda de cambio en un régimen de custodia compartida, de ahí que se deniegue para evitar que los niños vivan una situación que probablemente ya estaban viviendo antes del divorcio.
Mismo modelo educativo
Como siempre explicamos a los clientes que se acercan a nuestro despacho de abogados de divorcios en Madrid, los intereses de los menores están por encima de toda argumentación que puedan esgrimir sus padres. En este sentido, para que se atribuya una custodia compartida resulta clave que los dos progenitores estén de acuerdo con el modelo educativo que quieran que sigan sus hijos. Las discrepancias en este punto pueden provocar que un Juez no acepte este tipo de custodia, especialmente si afectan a valores o creencias básicas para su desarrollo personal.
Misma ciudad de residencia
Y por último, el hecho de que los dos miembros de la expareja residan en la misma ciudad facilitará que un Juez apruebe la custodia compartida. Cuando no es así y ambos viven en ciudades, provincias o países diferentes, es lógico que este régimen resulte inviable y deba optarse por atribuir la custodia a uno de ellos, concediendo un régimen de visitas al progenitor no custodio.
Como siempre te recomendamos en estos casos, a la hora de solicitar este tipo de custodias es conveniente ponerse en manos de un gabinete especializado en divorcios como Abogados Divorcio Express, donde velaremos por tus intereses y los de tus hijos.